Hay un dicho popular que dice que nuestro hogar es nuestro templo. Sin embargo, debe ser un templo asegurado frente a todo tipo de imprevistos. Uno de los siniestros más graves que se declaran son los incendios en el hogar, de los que hablamos hoy en el blog de MyCAXA.

Cuáles son las causas de los incendios en el hogar más frecuentes

En un elevado porcentaje de los casos, los incendios se producen por pequeños descuidos. Sin embargo, conllevan graves consecuencias, por lo que evitarlos es la prioridad principal.

Las zonas donde suelen producirse la mayor parte de los incendios en el hogar son la cocina, el salón y el dormitorio.

De hecho, la cocina concentra una serie de componentes y situaciones que, sin un control, pueden terminar en incendio. Así, la conjunción entre fuego, calor, grasa, electricidad y agua puede jugar una mala pasada.

Por ejemplo, es más frecuente de lo que cabría esperar el olvidar una sartén al fuego. También pueden ocurrir incidentes con el horno, el gas, la freidora y el extractor de humos.

Los fallos eléctricos, como los cortocircuitos también están entre las causas más comunes de incendios. Estos suelen producirse en instalaciones defectuosas o antiguas, o por falta de mantenimiento.

También las chimeneas y estufas y las velas se encuentran en el ranking de los causantes de incendios en el hogar.

Medidas preventivas

En aras de evitar posibles incendios en el hogar, hay una serie de medidas preventivas que pueden ahorrar disgustos.

Por un lado, todos los electrodomésticos, especialmente los de la cocina, deben limpiarse y revisarse con frecuencia, para evitar que se taponen conductos de ventilación, se acumule suciedad o pelusas, se pelen cables, etc.

Sin olvidar, claro está, los calefactores y estufas portátiles. Nunca deben dejarse sin supervisión y deben mantenerse a una distancia prudencial de materiales inflamables.

Si hay chimeneas o velas encendidas, también es fundamental cerciorarse de que se han apagado correctamente antes de abandonar la casa.

Por otro lado, la seguridad eléctrica es primordial. Una instalación eléctrica que no cumple la normativa vigente o cuyas conexiones no son seguras, puede dar lugar a cortocircuitos que deriven en un incendio. Otro punto a revisar son los alargadores y bases múltiples de enchufes.

Además, es necesario revisar y mantener la instalación de gas y caldera para prevenir posibles fugas.

Finalmente, los productos inflamables deben de almacenarse correctamente, lejos de aparatos eléctricos y fuentes de calor.

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