En el mundo de los seguros, hay un término que se repite con frecuencia y que, sin embargo, genera muchas dudas: el siniestro. Entender qué significa, cómo se declara y qué implicaciones tiene es clave para aprovechar correctamente tu póliza y evitar sorpresas desagradables. Hoy, en MyCAXA,  te contamos qué es un siniestro en un seguro y cómo gestionarlo.

Qué es un siniestro en un seguro: guía práctica para entenderlo

Un siniestro es cualquier hecho o acontecimiento previsto en tu póliza que provoca un daño y da derecho a recibir una indemnización o prestación por parte de la aseguradora.

En otras palabras, es la situación en la que se pone a prueba la utilidad real de tu seguro. Puede tratarse de un accidente de tráfico, un robo en el hogar, una rotura de tuberías o un problema médico, dependiendo del tipo de póliza contratada.

Los tipos de siniestros más comunes

Por ejemplo, en un seguro de hogar, un incendio que daña tu salón, una tubería que se rompe e inunda tu baño, o un ladrón que fuerza la cerradura para entrar en tu casa.

En el caso del seguro de coche, puede tratarse de un accidente en el que eres el culpable o la víctima, un robo total o parcial del vehículo, un golpe de granizo que abolla el capó, o la rotura de una luna.

Si hablamos del seguro de salud, podría ser una enfermedad repentina que requiere hospitalización, una visita de urgencia a un especialista, o una operación quirúrgica programada.

Por último, en un seguro de vida, el fallecimiento del asegurado o una incapacidad permanente que le impide trabajar.

El paso a paso: ¿qué hacer ante un siniestro?

Una vez que ocurre el imprevisto, la clave es mantener la calma y seguir estos pasos para que tu compañía de seguros pueda ayudarte de la forma más rápida y efectiva:

  1. Protege tu seguridad y la de los demás: en caso de accidente, lo primero es verificar que todos están a salvo. Si es necesario, llama a los servicios de emergencia.
  2. Documenta lo sucedido: haz fotos o vídeos del lugar, de los daños y de cualquier detalle relevante. Si hay otras personas implicadas, intercambia datos de contacto y de sus seguros.
  3. Contacta con tu compañía: lo más importante es comunicar el siniestro cuanto antes. La mayoría de las compañías tienen un plazo máximo para hacerlo (normalmente 7 días). Puedes llamar por teléfono, usar la aplicación o entrar en su área de clientes online.
  4. Aporta la información necesaria: la compañía te pedirá datos sobre el siniestro, como la fecha, la hora, el lugar, las personas y vehículos implicados, y una descripción de lo ocurrido.

Una vez comunicado el siniestro, tu aseguradora se encargará de gestionar el caso. Enviará a un perito si es necesario para evaluar los daños, y te guiará durante todo el proceso de reparación o indemnización.

Entender qué es un siniestro y cómo se gestiona es una herramienta muy valiosa que te dará la tranquilidad de saber que, pase lo que pase, tu seguro está ahí para ayudarte.